En nuestro país, los municipios son considerados como el primer contacto de una autoridad pública con las personas; al ser estos sujetos obligados, debemos trabajar de manera interinstitucional para garantizar que la transparencia y la rendición de cuentas sean una realidad en todos los municipios del territorio nacional, derribando las múltiples dificultades que ello incluye.
Como lo marca nuestra Constitución en su artículo 115, un municipio contiene las bases de la participación social, la formación del gobierno y su ejercicio, así como las necesidades y demandas de la población.
El 65% de las personas que vive en los municipios de menos de 70 mil habitantes se encuentra en situación de pobreza, esto es, que presenta o carece de algunos elementos como: rezago educativo; acceso a servicios de salud, alimentación y seguridad social; calidad y espacios de vivienda; entre otros. De hecho, Oaxaca es la entidad con el mayor número de municipios de este tipo (564 de 570) En tanto, para el caso de la población que habita en municipios mayores a 70 mil habitantes, este promedio de situación de pobreza disminuye a nivel nacional.
Datos de la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) nos permiten saber que el interés por acceder a información pública en los municipios ha ido a la alza: de 2021 a 2022, las solicitudes de información realizadas a los municipios crecieron de 225 mil a 344 mil, un incremento del 52.9%; asimismo, en el mismo periodo de tiempo, los recursos de revisión realizados a los municipios también aumentaron de 12 mil a 22 mil, un alza del 73.5%.
Hoy en nuestro país existen diversos retos para los municipios en materia de transparencia: las diferencias en los grados de desarrollo entre ellos; la carencia de información básica, accesible y confiable sobre el desempeño de las autoridades; la escasa capacidad institucional para vigilar la acción pública; y la baja participación ciudadana, son algunas barreras que debemos afrontar.
Desde la Comisión de Asuntos de Entidades Federativas y Municipios del SNT se propuso elaborar un diagnóstico que permitiera conocer las condiciones que, en materia de transparencia, enfrentan los gobiernos municipales con menos de 70 mil habitantes, con el objetivo de desarrollar políticas públicas específicas alineadas con la política nacional de transparencia.
Los resultados de dicho diagnóstico reflejan que los municipios mejor evaluados son los que tienen mayor cobertura de telefonía fija, celular o internet; presentan porcentajes menores de pobreza; y se caracterizan por tener una mayor participación porcentual de mujeres como responsables de las unidades de transparencia.
De igual forma, ya contamos con propuestas concretas para mejorar los mecanismos de transparencia en estos municipios. Cada uno de los 32 órganos garantes estatales deben realizar una clasificación de los municipios de su entidad con el objetivo de brindarles apoyo en capacitación y seguimiento según su grado de requerimientos, así como crear los micrositios necesarios con información relevante de los municipios en las páginas web de los organismos garantes.
Sin embargo, en muchos casos, la voluntad puede más que las brechas; existen municipios que, a pesar de sus condiciones, cumplen con la carga de información y se hacen valer de mecanismos para ello, por ejemplo. trasladarse a un municipio vecino que sí cuenta con condiciones tecnológicas para cumplir con sus habitantes y transparentar su ejercicio. De esos ejemplos nos debemos valer, más aún algunos gobiernos que tienen todo para cumplir y siguen simulando ser transparentes.
Fuente: El Sol del Centro
