¿Sabías que en 2022 el promedio del ingreso total mensual de los hogares en nuestro país fue de 22 mil 437 pesos? Mientras que el 10% de los hogares que perciben los ingresos más bajos gana en promedio 4 mil 471 pesos al mes.
¿Sabías que en 2022 el promedio del ingreso total mensual de los hogares en nuestro país fue de 22 mil 437 pesos? Mientras que el 10% de los hogares que perciben los ingresos más bajos gana en promedio 4 mil 471 pesos al mes, el 10% más rico ingresa 66 mil 899 pesos, es decir, 15 veces más. Por si fuera poco, la disparidad de ingreso mensual entre hombres y mujeres es de 34.8%.
Estas cifras revelan la enorme desigualdad que, hasta la fecha, nuestro país sigue padeciendo, misma que afecta la calidad de nuestra democracia y del Estado de derecho. Por ello, es fundamental que la sociedad conozca esta información, pues el pensamiento crítico es un pilar de una ciudadanía participativa que demande resultados a las autoridades.
Recientemente, México, ¿Cómo vamos? y el Centro de Estudios Espinosa Yglesias publicaron la antología “Reimaginemos el panorama: ingresos, gastos y desigualdades” con los últimos datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Ambas organizaciones civiles generan investigaciones especializadas orientadas a conocer problemáticas sociales e impulsar el progreso y la movilidad social en nuestro país. Asimismo, buscan aportar insumos de alta calidad y contribuir al diseño de políticas públicas para cerrar brechas en carencias sociales relacionadas con la pobreza, la desigualdad y la seguridad alimentaria.
Además de presentar análisis cuantitativos, el informe contiene diversos diagnósticos de expertos sobre temas de interés público como los sistemas de salud, educativo, fiscal, de pensiones, entre otros. Y toman en cuenta la gravedad del impacto social que dejó la pandemia de covid-19 en territorio nacional.
El informe referido presenta datos muy reveladores sobre distintas facetas de la desigualdad. Por ejemplo, sobre el gasto de las y los mexicanos, el 10% de los hogares que perciben los ingresos más bajos gasta 56% de su ingreso en alimentos y 4.2% en salud; mientras que el 10% más rico gasta solo 14% en el primer rubro y 2.2% en el segundo.
Respecto a la política social, uno de los hallazgos destacados del estudio es que, con datos observados en 2020 y 2022, las transferencias gubernamentales han presentado un incremento en mayor proporción en hogares de ingreso alto; sin embargo, no presentan cambios significativos en los hogares más vulnerables.
Esto puede atribuirse a que algunos programas sociales de transferencias directas como la “Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores” son universales y no están focalizados a hogares de menores ingresos. De igual forma, cabe precisar que entre 2020 y 2022 es más homogénea la distribución que entre 2018 y 2020, lo cual revela una reestructuración de la política social entre ambos periodos.
Asimismo, el flujo mensual de entrada de remesas a México se ubicó, en julio de este año, en 5 mil 651 millones de dólares. Sabemos que estos recursos son fundamentales para la economía de nuestro país pero, ¿Cómo se distribuyen entre la población? En los hogares de menores ingresos, las remesas representan más de una tercera parte de su ingreso total (casi 36%), y en los estratos más altos, representa menos del 17%.
Reducir la asimetría de información entre sociedad y gobierno, acceder a información verificable y de calidad, así como abrir conversaciones sobre temas públicos, son los primeros pasos para cambiar la realidad. Instituciones del Estado mexicano, sector privado, sociedad civil y población en general debemos ser conscientes de la magnitud de la desigualdad, pues solo en conjunto podemos disminuirla.
Fuente: La Verdad Noticias