¿A cuántos les da flojera hablar de la Constitución? Entiendo que no a todos les va a gustar leerla como su libro de cabecera, pero considerando que es el instructivo de nuestra vida en comunidad como mexicanos, creo que deberíamos darle una hojeada alguna vez sobre todo cuando de opinar de temas políticos y de conformación del Estado se trata.
Es un discurso pegador mediático el referir que es el pueblo quien debe tener la última palabra, y el pueblo debe decidir, pero no queda muy claro ¿Quién es ese pueblo al que se refieren, ni bajo qué mecanismos ese pueblo emitirá sus opiniones? Todo esto sí está resuelto en la Constitución. Para empezar el pueblo somos todos, lo dice la constitución y no podemos permitir que un grupo político se apropie del concepto para determinar a su conveniencia quién sí es pueblo y quién no.
No confundamos democracia con campaña mediática, soy la primera persona que señala la necesidad de implementar mecanismos de gobierno abierto, donde el pueblo, como les gusta llamarlo, participe activamente en las tomas de decisiones del gobierno y ejerza actos de revisión. Pero no olvidemos que como primer punto es indispensable que exista transparencia en las actividades del gobierno, porque la participación ciudadana no puede ser una sumatoria de masas que aclaman por inercia y acarreo sin saber qué están coreando. No podemos permitir un pueblo desinformado, que se entera por memes y fases pegadoras, la participación ciudadana es indispensable para un buen funcionamiento del Estado, pero no como una masa manipulable sino como la aportación de conocimiento y experiencia ciudadana al servicio de todos, vigilando que los administradores de la cosa pública lo hagan correctamente. La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos cumple hoy 107 años, cierto es que ha tenido más de mil reformas, unas para mejorar otras no tanto, poco se parece al documento de 1917, pero está ahí para defender a los ciudadanos del gobierno, está para limitar al poder y obligarlo a conducirse de una forma previamente establecida, para eso sirven las constituciones y no es nuevo que los gobernantes autócratas siempre han luchado contra los límites constitucionales.
Se han anunciado varias reformas constitucionales para ser dadas a conocer este 5 de febrero de 2024, se rumora la tendencia a desaparecer o menguar los mecanismos de vigilancia, minando la transparencia, el combate a la corrupción y desbaratando el poder judicial. Se pedirá todo esto en nombre del pueblo bueno y yo te pregunto a ti buen ciudadano ¿Estás dispuesto a permitir que se reduzcan o eliminen de la constitución los mecanismos que te protegen de los excesos de los gobernantes y que te permiten llamarlos a cuentas? En nombre del pueblo de México la Constitución debe contener todos los elementos de vigilancia, rendición de cuentas y control que nos permitan asegurarnos que los gobernantes no nos mientan, no nos roben y no nos traicionen.
Fuente: Milenio