El lunes pasado los cuatro Comisionados en funciones del Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI) presentaron ante el Presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República “petición formal” para poder “formar parte del nuevo organismo autónomo en el ámbito federal”, en la materia.

Así lo ordena el artículo tercero transitorio del decreto de reforma constitucional promulgado por Peña Nieto a principios del presente mes. En esos términos es que Gerardo Laveaga Rendón, actual Comisionado Presidente, Ángel José Trinidad Zaldívar, María Helena Pérez Jaén y Wanda Sigrid Arzt Colunga, cada uno por su lado y en su propio estilo han manifestado vía oficio que desean continuar en el cargo.

Actitud que desde mi punto de vista es muestra de congruencia en cada uno de ellos pero que tiene significados distintos hasta en las características de sus misivas que me propongo desmenuzar aquí para opinar intrínsecamente en qué grado cada uno de ellos creo que merece continuar en el cargo aunque sabemos que la decisión de los senadores tiene que ser pragmáticamente política, es decir responsable.

Pero, y sin que esto suene a contradicción yo considero que deberían permitirle a todos ellos cumplir con el periodo para el que fueron nombrados, simple y sencillamente por el más puro apego a la legalidad.

Contrasta en principio que mientras la misiva de Pérez Jaén es de sólo una página y la de Laveaga de dos, por su parte Sigrid Arzt envía un documento de 33 en el que anexa su currículum.  Por su parte en un punto intermedio está el oficio de Trinidad Zaldívar de cuatro.

Sin ser parca la comunicación pero que suena mucho a lugar común, está la expresión de la primera quien dice querer “formar parte del nuevo organismo”, “con el propósito de robustecer la experiencia del nuevo órgano colegiado y garantizar su continuidad institucional;…”

Por su lado Laveaga me parece un poco más contundente con la afirmación que hace de que “…el IFAI es un detonador de la participación ciudadana.  Pero un detonador institucional: un tribunal administrativo, un órgano de Estado que debe conducirse en los términos constitucionales y legales.”  Definición con la que se tiene que estar de acuerdo. Y por ello dice contar “con las características profesionales y la experiencia para defender los derechos de acceso a la información y protección de datos…”  Esta última cuestión que sus malquerientes le quisieran esquilmar pero en nuestro criterio es muy difícil que objetivamente demuestren lo contrario.

En el caso de Arzt Colunga, quitando toda la paja innecesaria para lo que ordena el tercero transitorio del decreto, me parece importante destacar que es una de los dos que técnicamente está solicitando “terminar el periodo” por el que fue nombrada. Y enumera cuatro razones para hacerlo, de las que nos parece central la última por ser, creo una valiente postura, quizá “políticamente incorrecta”, pero valiente al remarcar (con negritas en el texto original) “la inexistencia de causas reales, fundadas y probadas” que le “impidan concluir el periodo para el que fue designada…”

Y finalmente la carta de Ángel José Trinidad me parece la que de manera más pulcra señala las razones (haciendo a un lado cualquier falsa modestia) por la que desea concluir su encargo; y que además se atreve a definir con claridad un compromiso político, en el puntual sentido de esta palabra, con la transparencia.  Creo que es una pieza que vale la pena leer completa, cosa que pueden hacer aquí: www.senado.gob.mx/sgsp/gaceta/62/2/2014-02-18-1/assets/documentos/OFICIO_IFAI_ANGEL_TRINIDAD_SALDIVAR.pdf.

Aunque yo sólo quiero extraer dos citas que considero son tan verdaderas como sensibles en la coyuntura política de México. Primero cuando señala, cosa con la que estoy plenamente de acuerdo, “…que para lograr un verdadero avance en la materia y que estos temas se vuelvan de uso cotidiano y se incorporen en el ánimo de los ciudadanos, es indispensable comenzar con los niños.”  Y creo que su mirada es nítida cuando dice que “la transparencia no es monopolio de ninguna fuerza política sino el resultado de un vasto consenso nacional.”  Y que “La mejor vacuna para inocular la necesaria austeridad republicana es la transparencia.”

Ya veremos en qué términos se pronuncian los senadores antes de que concluya febrero.  Mientras nosotros más que apuestas o marcar predilecciones sobre uno u otro de los actuales comisionados para que continúen en el “nuevo” IFAI, o como lo vayan a llamar, preferimos destacar lo más objetivamente posible lo que ellos mismos argumentan a su favor.

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