Los oaxaqueños tendremos que esperar nuevamente, la conformación de un órgano garante del acceso a la información, con autonomía plena y libre de presiones partidistas. El 30 de junio del presente, se reformó la Constitución Política del Estado libre y Soberano de Oaxaca para dar paso al nuevo Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado. Las reformas se derivan en primer lugar, de la armonización pendiente que tenía el congreso local respecto a la reforma constitucional del Constituyente en 2014. En segundo lugar, desaparecer a la COTAIPO por los desastrosos resultados en la materia y por la disfuncionalidad debida a la fractura entre el consejero y las consejeras.
El día 17 del mes en curso se aprueba por el Pleno, la convocatoria pública para elegir a los nuevos comisionados del nuevo órgano garante. Sin embargo, se llevo a cabo un procedimiento fast-track, los días 18 y 19 para publicación, 20 y 21 para recibir propuestas, 24 y 25 para entrevistas. Se espera que los resultados se den el día 28. Otra vez, un Derecho consagrado en la Constitución General y Particular del Estado se ve vapuleado, mancillado, atropellado por nuestros Diputados y Diputadas de la actual legislatura. No entendieron que un órgano Constitucionalmente Autónomo, requiere de una conformación multidisciplinaria con experiencia, profesionalismo y compromiso de quienes lo integran. Se ha pedido insistentemente de diferentes maneras, que debe ampliarse la brecha de independencia entre el órgano garante y los sujetos obligados sobre los cuales tiene autonomía, libre de toda interferencia política y que sea capaz de resistir a la influencia de intereses creados. Esta circunstancia ha sido “el Talón de Aquiles” de la transparencia y el acceso a la información de nuestro Oaxaca. Se ha puesto de manifiesto en distintos estudios realizados por los expertos, entre ellos el Centro de Investigación y Docencia Económicas –CIDE – y el Centro de Análisis e Investigación FUNDAR. El anterior procedimiento de selección de los comisionados fue endeble y no fue certero y previsible (etapas y plazos); no cumplió con los criterios de transparencia, nunca se difundieron las versiones públicas de los currículos de los seleccionados a los cargos; careció de apertura ciudadana en las entrevistas que se realizaron, a pesar que fueron filmadas, nunca se encontró evidencia de ellas. Nada de esto pudo hacer que la actual legislatura cambiará de visión.
Hoy, el procedimiento fue inaudito, atropellado diría yo, se les fue el tiempo en revisar los requisitos para que nadie de sus incondicionales quedará fuera, una convocatoria laxa, solo tienen esta semana para cumplir el plazo perentorio de 60 días naturales que se impusieron para ungirlos.
Este procedimiento fast-track pone de manifiesto, a lo que nos tiene acostumbrados esta legislatura, la simulación. En la lista de aspirantes, se encuentran profesionistas con fuertes vínculos al interior del congreso, es decir, personas al servicio de los actuales diputados. Otra más con vínculos a un personaje del PRI, José Antonio Hernández Fraguas, hasta hace poco representante del PRI en el INE. De apellido Carballido, se quedó sin chamba hace unas semanas del órgano electoral del estado, por lo que ahora se le quiere imponer en este órgano. Ya los medios barajean esos nombres, el nuevo instituto está condenado a otra renovación cuando la actual legislatura haya terminado su encargo, vendrá la otra y de nuevo enjuiciará al instituto por sus resultados magros. El circulo vicioso de un órgano constitucional autónomo, que solo se le ve como una agencia de colocaciones por parte de los partidos políticos.
Mientras tanto los oaxaqueños tendremos que esperar que otro organismo garantice nuestro Derecho de Acceso a la Información en el estado. No tengo duda que muchos ciudadanos haremos uso del recurso establecido en la Norma Suprema, interponer recursos en contra de las resoluciones del órgano garante estatal ante el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la información y protección de Datos Personales – INAI -. Por cierto, en la armonización de la Constitucional local, este recurso lo obviaron en la constitución local, dicho en otras palabras, previniendo este atraco, nos cercenaron este recurso a los Oaxaqueños.
Hoy en esta convocatoria no se estableció el instrumento técnico para evaluar y calificar a los aspirantes, tan es así que los tres Comisionado actuales: Gema, Esteban y Eréndira fueron a entregar sus documentos para volver a aspirar a dirigir el nuevo instituto, ¡sin palabras!
Por eso, en ausencia de un procedimiento amplio y con criterios aperturistas, donde no se percibe claridad en la selección, no nos queda más que pedirle a la Junta de Coordinación política del Congreso, que revire y se tome su tiempo para una selección clara, detallada y responsable. Los enjuagues partidistas, las lealtades políticas y sus intereses económicos, deben quedar, por primera vez, al margen. Los verdaderos ciudadanos no podemos ofrecerlos nada de eso, lo que sí, experiencia, trabajo y compromiso para garantizar el Derecho de Acceso a la Información de los miles de oaxaqueños y oaxaqueñas.
Ya estuvo bueno de jugar con este Derecho, el recuento de los daños de la COTAIPO, un órgano que por un proceso de selección amañado, nació sin legitimidad y solo fue utilizado de meme de la transparencia, es por demás evidente.
¡Queremos un órgano garante, con plena autonomía partidista, pero sobre todo libre de presiones de ustedes! Oaxaca se lo meceré.
Es cuanto.