Es una de las palabras más mencionadas por los mexicanos. Uno de los temas que, junto con la inseguridad, la pobreza y el desempleo, más les molesta y preocupa. Su crecimiento exponencial en el gobierno aún en funciones fue una de las cuestiones principales que los electores castigaron severamente en las urnas: la corrupción.

De principio a fin —yendo del escándalo de la “Casa Blanca” al de “La Estafa Maestra”— la corrupción se asoció como el sello de origen de la administración del priista Enrique Peña Nieto. Y este tema forma parte del resultado del 1 de julio, donde más de 20 millones de personas repudiaron todo lo que tuviese tono tricolor: José Antonio Meade Kuribreña, el candidato a la Presidencia por la Coalición Todos por México, perdió en los 300 distritos del país y el Partido Revolucionario Institucional, con el que Meade ocupó tres secretarías de Estado, no obtuvo ni una sola gubernatura de las nueve que se disputaron…

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