Estamos viviendo una crisis de confianza que puede desembocar en una crisis de legitimidad; la confianza no se reconstruye de un día para otro, dijo Mauricio Merino Huerta, coordinador de la Red por la Rendición de Cuentas, al referirse a la decisión tomada por Angélica Rivera, esposa del jefe del Ejecutivo, de vender la propiedad que tiene en las Lomas de Chapultepec conocida como la “Casa Blanca”.
No será posible resolver esta crisis de confianza, agregó, acudiendo a las mismas prácticas de siempre. “Esta crisis es mayor aun cuando las reformas para crear un sistema anticorrupción o aprobar una nueva Ley General de Transparencia, salgan adelante”, agregó en entrevista con Denise Marker, conductora de Radio Fórmula.
La reconstrucción de la confianza, subrayó, “necesita del jefe del Estado en primer lugar -del presidente Peña, del Congreso-, con respuestas completamente distintas. Estoy esperando que frente al tamaño de la desconfianza la representación política del Estado reaccione con sentido de urgencia y lo hagan de manera diferente”.
Consideró que es “muy difícil” pensar que este sexenio pueda terminar con los mismos titulares de las dependencias que tenemos en este momento, con las mismas rutinas burocráticas y los mismos equipos de trabajo “como si aquí no pasara nada”.
“Y me parece también inaceptable que el Congreso de la Unión no obstruya, no frene, no reaccione con altura para modificar prácticas como la del reparto del Ramo 23 del Presupuesto de Egresos de la Federación, donde ya sabemos que se dan los moches”, apuntó.
Merino dijo que el tema de las propiedades de la esposa de Enrique Peña Nieto sí es un asunto de interés público. “No es la actriz Angélica Rivera, es la esposa del Presidente, es la persona que decide casarse en su momento con quien ya era gobernador; claro que entra a la esfera del interés público”, dijo.
La esposa del Presidente dio a conocer el martes 18 por la noche un video transmitido simultáneamente en su sitio de Internet y en el noticiero principal de Televisa, en el que explicó el origen de su propiedad, mostró el contrato de compra de los terrenos en cuestión y su declaración fiscal del 2010, y anunció su decisión de vender los terrenos adquiridos y que aún no terminaba de liquidar.
Merino Huerta dijo a Maerker que la crisis de confianza no se expresa en órganos burocráticos o normas jurídicas, sino en percepciones y opiniones generalizadas de una sociedad que recibe de sus gobernantes mensajes ambivalentes o contradictorios.
“El golpe a la confianza no solo es por la llamada Casa Blanca, sino por Tlatlaya o Ayotzinapa (y) la lista es cada vez más larga”, agregó.
Todo esto, dijo, prefigura una situación muy delicada, porque está tocando la base de la confianza del Estado mexicano.
“Hay dos elementos a considerar, por lo menos:
“1) la relación que existe con un contratista (Grupo Higa) que ha obtenido contratos grandes antes y después de que el Presidente fuera Presidente. Es decir, siendo gobernador y siendo presidente. Es un hecho público conocido.
“2) Los dueños de esa casa son los dueños de esa empresa. Si la casa hubiera sido de Perico de los Palotes, alguien que nunca hubiera hecho negocios con el gobierno, pues santo y bueno, no pasaría el asunto de las revistas del corazón, para ponerlo de ese modo”, dijo Merino.
Merino pidió tomarle la palabra al presidente Peña Nieto cuando dijo en su discurso del martes pasado en el estado de México que esta es una “oportunidad” para que todos los servidores públicos hagan transparente el origen de su patrimonio.
La respuesta a todo ello, añadió, es la más absoluta transparencia. “No creo que sea necesario esperar al siguiente escándalo para que las cosas cambien”, insistió.
El coordinador de la RRC recordó que en estos momentos se discute en el Congreso la nueva Ley General de Transparencia, la legislación secundaria en la materia, un paquete referido a Datos Personales y la Ley General de Archivos.
Afirmó que la Ley General de Transparencia “viene bien; se trata de un proyecto es ambicioso en el que han tenido participación actores de la sociedad civil, como la RRC o México Infórmate, pero está en su primer proyecto. Falta que pase por toda la ruta del proceso legislativo”.
También está en el Congreso la propuesta del PAN para crear un Sistema Nacional Anticorrupción, “que está todavía en un nivel muy básico, aunque debería tomarse como un asunto prioritario”, dijo.