Uno de los efectos constatables de las grandes manifestaciones del día 26 de febrero, fue su capacidad para llamar la atención de la opinión pública internacional acerca de la intentona del gobierno de México por dañar y desmantelar a las instituciones autónomas que organizan y supervisan las elecciones en este país. De modo que al lado del gran número de litigios e impugnaciones jurídicas que viviremos, se abre una nueva arena de discusión pública y de exigencia internacionales. Mantener viva esa flama parece ser una obligación de la sociedad civil democrática en México, y por eso un grupo amplio de OSC’s se ha dado a la tarea de organizar el Foro Internacional “Retroceso de las democracias: El caso de México. Un llamado a la opinión pública internacional”.