El organismo rector del fútbol anunció el viernes que recibió tres informes del fiscal de ética Michael García y su equipo, que realizaron una pesquisa de un año sobre la supuesta corrupción en las candidaturas ganadoras para los mundiales de 2018 y 2022.

Catar y Rusia, sede del Mundial de 2018, fueron elegidos en diciembre de 2010 por el criticado comité ejecutivo de la FIFA.

La FIFA no especificó si el informe de García, de 350 páginas, recomienda la posibilidad de quitar a Catar la sede del Mundial de 2022.

“El informe detalla ciertos hallazgos; llega a conclusiones sobre más medidas relacionadas con ciertos individuos; identifica asuntos para ser referidos a otros comités de la FIFA; y realiza recomendaciones para procesos de candidaturas futuros” , señaló la FIFA.

García quería entrevistar a todos los miembros de la junta de la FIFA involucrados en el proceso para elegir las sedes de 2018 y 2022, aunque no se sabe quiénes cooperaron. García y sus investigadores se reunieron con funcionarios de los nueve países candidatos en una gira que empezó en octubre.

García no investigó a Rusia, donde no puede realizar sus funciones por su trabajo anterior como fiscal del gobierno de Estados Unidos, ni la candidatura estadounidense que perdió ante Catar en la última ronda de votación. Esas pesquisas estuvieron a cargo de Cornel Borbely, un abogado suizo que es el subdirector del comité de ética.

Los informes, postergados desde julio, serán examinados por el juez de ética de la FIFA Joachim Eckert, quien puede imponer sanciones. No está claro si Eckert tiene el poder para quitar una sede u ordenar que se realice otra votación.

Eckert sí puede pedir más entrevistas o “devolver el informe final al grupo investigador (de García) para realizar enmiendas o completarlo” , según el código de ética de la FIFA.

La FIFA otorgó a García y Eckert tiempo y presupuesto ilimitado para completar la pesquisa sobre un tema que ha afectado la reputación de la FIFA, aunque no su poder comercial. La FIFA generó unos 4.500 millones de dólares por el Mundial de 2014 en Brasil, mientras aumenta el valor de los derechos de transmisión futuros.

El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, insiste que sólo el comité ejecutivo puede cambiar una sede….

Nota completa en: El Universal