La impunidad está basada en la opacidad y el secreto, así como la falta de acceso a la información y de rendición de cuentas; y “ésta no sólo se reduce al sector público, pues se ha identificado que el privado también reproduce estas prácticas”, señaló John Heilbrunn,  profesor asociado e investigador del laboratorio Las Áfricas de la Unidad de Ciencias Políticas de la Universidad de Burdeos, en Francia.

heilbrunn3Durante la conferencia magistral en el Seminario Internacional “Responsabilidad Pública y Rendición de Cuentas”, Heilbrunn destacó que el problema de la corrupción y la impunidad, más que un fenómeno institucional, es un hecho humano y no exclusivo de algún país o región en específico, por lo que se deben tomar acciones globales y coordinadas  para combatirlas.

El investigador del laboratorio Las Áfricas de la Unidad de Ciencias Políticas de la Universidad de Burdeos, Francia señaló que estos problemas no sólo afectan cuestiones económicas, también tocan aspectos como el ecológico, social, cultural y de desarrollo humano.

Países como Angola y Nigeria son dos casos de naciones petroleras, muy parecidas a México, cuya evolución ha sido afectada seriamente por casos de corrupción.

Un claro ejemplo es el Escándalo TSKJ, en el que diversas empresas y empleados gubernamentales de distintos países habrían pagado 182 millones de dólares en efectivo a cambio de un contrato, de hace más de 10 años, que terminó en 2005, para la construcción de una planta de gas natural licuado, en el sur de Nigeria.

“Este caso se permitió gracias a que no existían leyes claras en materia de acceso a la información y combate a la corrupción, esenciales en la construcción democrática de las naciones”, argumentó.

Se tienen que revisar los mecanismos que propician estas prácticas corruptas y no sólo castigar a quien recibe un soborno o algún beneficio personal, sino a quien lo da; porque para que un acto ilegal suceda, se requieren dos partes.

El académico invitó a los países que cuentan con grandes riquezas naturales, que preserven una cultura de la transparencia y rendición de cuentas, no sólo en Estados que se encuentran en vías de desarrollo, sino  también en países del “primer mundo”.

HeilbrunUn elemento importante, dijo, es la participación de la sociedad civil organizada y los medios de comunicación para exhibir y dar seguimiento a todos los casos, a fin de que no queden impunes estos hechos.

Finalmente, recomendó que para tener instituciones fuertes de combate a la corrupción es necesario reformar las leyes en la materia, y, sobre todo, fomentar la sensibilidad de las personas  y desalentar este tipo de prácticas.

“La pobreza, desigualdad e inequidad social son resultado de un sistema corrupto, deshonesto e impune; se deben combatir para lograr un verdadero equilibrio en los distintos niveles”, concluyó.

El Seminario Internacional “Responsabilidad Pública y Rendición de Cuentas” se lleva a cabo este martes 13 de octubre en el Hotel Hyatt Regency con la participación de destacados ponentes internacionales que comparten experiencias.

Mayor información y transmisión en vivo: http://rendiciondecuentas.org.mx/