En el círculo rojo, analistas, especialistas, políticos y funcionarios se habla con frecuencia de la transparencia en los gobiernos y la necesidad de ampliarla. No obstante el 86 por ciento de los mexicanos no saben cómo realizar una solicitud de información de acuerdo a la encuesta realizada por Parametría.

En estricto sentido, el interés por la transparencia no debería marcar el grado de opacidad gubernamental. Aunque sería deseable que en un futuro próximo disminuya el porcentaje de los mexicanos que consideran que el Poder Legislativo es extremadamente corrupto; actualmente es el 57 por ciento de acuerdo con el Barómetro Global de la Corrupción 2013 de Transparencia Internacional.

El reto es abonar a la percepción de gobiernos más transparentes y que la calidad de la información que proporcionan sea exhaustiva, actualizada, completa, accesible y comprensible. ¿El Poder Legislativo a nivel federal alcanza estas características?

Dilemas sin solución

Hasta ahora el sistema político está empeñado en mantener un nicho de opacidad tal que le permita preservar su zona de confort. El Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018 no incluyó líneas de acción para fortalecer la transparencia. La Suprema Corte de Justicia de la Nación negó que las declaraciones patrimoniales fueran públicas. Los legisladores no han aprobado la reforma constitucional de transparencia que engrose las facultades y alcances del IFAI e incluya como sujetos obligados de la ley a partidos políticos y sindicatos.

En contraste, son cada vez más frecuentes y mayores los escándalos derivados de la falta de transparencia, como la propiedad de la casa de la hija de la ex líder sindical del SNTE, Maricruz Montelongo Gordillo, que no podría adquirir con sus ingresos; o el contrato por 115 mdp por una aplicación que accede a información de “inteligencia legislativa” en la Cámara de Diputados

Estos acontecimientos pueden pasar de calambres mediáticos a la toma de medidas reales y permanentes en favor de la transparencia pública. Depende de la voluntad política de legisladores y autoridades de dar una solución institucional y legal a la opacidad del desempeño y uso de los recursos públicos.

La bitácora

Con el objeto de informar la ruta de las solicitudes de información en México y su alcance, Visión Legislativa y Animal Político solicitamos información al Congreso de la Unión mediante la Cámara de Diputados y el Senado. Con ello daremos a conocer las respuestas que se reciban en una bitácora ciudadana de transparencia.

La ruta básica de una solicitud de información pública y sus escenarios de respuesta, de acuerdo a la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública es la siguiente:

  • Se presenta solicitud de información al portal de transparencia, previo registro de usuario: Diputados y Senado.
  • Existen cuatro opciones de respuesta: que la autoridad declare su inexistencia, que reserve la información, que la proporcione completa o incompleta.
  • En el segundo y último casos, el peticionario podrá presentar un recurso de revisión. La autoridad encargada determinará si proporcionan o refrendan la negativa de información.

Fuente: Animal Político