El seguimiento del ejercicio del gasto público es indispensable para una verdadera rendición de cuentas. Sin embargo, conocer la “ruta del dinero público” de manera oportuna, accesible y confiable y las causas del destino de los recursos a ciertos rubros resulta difícil a través de los mecanismos que actualmente el gobierno ha puesto a disposición de la ciudadanía. Por ello, ahora que el Presupuesto de Egresos de la Federación está a punto de discutirse y aprobarse, diversas organizaciones han detectado la necesidad de fortalecer las previsiones de transparencia, gestión y rendición de cuentas del presupuesto.

Pareciera que parte del problema se origina en la noción “restringida” de transparencia que poseen algunos funcionarios involucrados en temas presupuestarios. Las políticas de transparencia en este rubro, se han limitado a hacer pública aquélla información que la ley les obliga. Sin embargo, no por ello atienden  ni la exigencia de rendición de cuentas (en particular la justificación de las decisiones), ni los atributos que debe poseer esta información, a saber, que los datos puestos a disposición sean presentados en formatos accesibles, relevantes, confiables y consistentes.

Una política de transparencia en sentido amplio implicaría una serie de decisiones y acciones para modificar las prácticas tradicionales de gestión pública. En este sentido, la Red por la Rendición de Cuentas ha propuesto la generación de “paquetes evaluativos presupuestarios” mediante los cuales los programas operativos del gobierno debieran alinear acciones, metas, objetivos así como indicadores para el seguimiento enfocados en resultados y no en procesos. (http://rendiciondecuentas.org.mx/hacia-una-politica-de-rendicion-de-cuentas/)

La propuesta consiste en atajar el problema de lógicas de evaluación dispersas –no atendida hasta ahora-mediante indicadores que estén vinculados con las metas propuestas, respondan al principio de máxima publicidad y presenten un lenguaje ciudadano que facilite su asimilación. Todo esto requiere de contrapesos institucionales por lo que se propone la creación de una oficina de análisis presupuestario que facilite el seguimiento del gasto y el fortalecimiento de la actuación de la Auditoría Superior de la Federación.

En lo que respecta exclusivamente al Decreto de presupuesto de egresos de la federación, México Evalúa ha hecho algunas recomendaciones puntuales. Una de ellas consiste en  poner a disposición del público una base de datos integrada con toda la información del presupuesto con datos de los ingresos y gastos en los distintos momentos del proceso presupuestario. Aunque la información al respecto existe en las bases de datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, ésta se encuentra dispersa y es insuficiente para un adecuado seguimiento que permita mayor rendición de cuentas. También proponen que la información sobre los ingresos se desagregue de manera suficiente y que se especifique en un informe por separado qué programas y proyectos de inversión se financian con ingresos excedentes y por qué. Ojalá y el Gobierno atienda estas recomendaciones.

Corolario: Esta semana, senadores del PAN, PRI y PRD lograron acordar modificaciones a diversas disposiciones de la Ley de Coordinación Fiscal y de la Ley General de Contabilidad Gubernamental para incorporar nuevas obligaciones para los estados en materia de transparencia del gasto. Los objetivos de estas modificaciones son: i)  transparentar y hacer eficiente el financiamiento de la educación básica y normal, ii) reforzar los incentivos para la recaudación local, iii) fomentar la recaudación eficiente, iv) promover un federalismo más transparente para la rendición de cuentas, v) modificar los criterios de distribución del FAIS para hacer su distribución más equitativa y eficiente  http://www.senado.gob.mx/sgsp/gaceta/62/2/2013-10-28-1/assets/documentos/Dic_Ley_Coord_Fiscal.pdf.