Los gobiernos toman decisiones económicas por razones políticas y toman decisiones políticas por motivos electorales, al final lo que más les preocupa es la elección, por esto mismo los ciudadanos la mejor herramienta que tenemos para calificarlos y hasta cierto grado presionarlos es nuestro voto.

Hablando de transparencia y anticorrupción las tres candidatas a gobernadoras en el Estado de Guanajuato tienen facturas a pagar por parte de sus partidos, ninguna se va limpia y haciendo una evaluación de lo que han hecho o dejado de hacer nos podemos dar una idea de la forma en que seguramente conducirían su gobierno en caso de resultar ganadoras.

Libia debe enfrentar como cargas pesadas que le hereda su partido, el no haber asignado un peso, en el año 2024, a los proyectos del Sistema Estatal Anticorrupción, así como la terrible omisión del Poder Ejecutivo en contactarse a la Plataforma Digital Estatal, para transparentar las declaraciones patrimoniales de los funcionarios del Estado.

Alma debe cargar con la falta de transparencia que el Gobierno Federal ha buscado todo el sexenio, reservando información vital como en los casos de COVID, así como la terrible corrupción en los sobreprecios en las obras insignia, como son el tren maya y la refinería de dos bocas, como mero ejemplo, que costaron más del doble de lo presupuestado y nadie puede ver las cuentas porque las reservaron con pretextos absurdos, así como el sabotaje que en todos los lugares donde gobierna su partido han sufrido los sistemas anticorrupción, al grado de desaparecer en varios Estados.

Yulma debe pagar las conductas poco claras del Gobierno de Nuevo León donde las operaciones factureras desviando recursos públicos a empresas con el mismo domicilio que el despacho del gobernador son bien conocidas. De igual forma en Nuevo León el Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción desapareció por la falta de voluntad política y de cumplimiento de las leyes en ese rubro.

Todas prometen transparencia y combate a la corrupción, pero el historial de sus partidos les genera un lastre de credibilidad ¿Hasta dónde los partidos realmente quieren que los gobiernos sean transparentes y no haya corrupción? Para nosotros como ciudadanos es tiempo de pedir cuentas de lo que ya han hecho para saber que tanto de verdad les importa el tema, Para nosotros sí es importante la Transparencia y el combate a la corrupción en el Estado.

Fuente: Milenio