El nivel de personas que declararon tener algo o mucha confianza en el gobierno en 2017 era de 25.5 por ciento, el año pasado el porcentaje subió a más del doble.
Uno de los estudios más interesantes que realiza el INEGI es la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental.
Esta se levanta cada dos años desde el 2011.
La semana pasada se dieron a conocer los resultados del levantamiento del 2023.
Hay mucha materia para analizar. Pero permítame concentrarme el día de hoy en los datos sobre la confianza de los ciudadanos en actores sociales e instituciones públicas.
Van algunos resultados comentados para el periodo de 2017 a 2023.
1.- Uno de los resultados más interesantes que el estudio arroja es el incremento de la confianza en el gobierno federal, como lo reportó ayer el artículo de Luis Carlos Ugalde en El Financiero.
Al margen de que uno simpatice o no con el gobierno de López Obrador, el resultado es que pasó de un nivel de 25.5 por ciento de personas que declararon tener algo o mucha confianza en el gobierno federal en 2017 a un 59.1 por ciento en 2023.
2.- No es el gobierno federal la institución que más confianza despierta. De modo consistente, la que mayor confianza tiene es la familia, con un 87.4 por ciento. A nivel institucional, en las instituciones que más confianza generan en los entrevistados se encuentra el Ejército y la Marina. Se podría haber pensado que la diversificación de actividades que han tenido en los últimos años, le podrían haber hecho perder algo de la confianza, pero no ha sido así. Resulta que esta pasó de 62.2 por ciento en 2017 a 71.5 por ciento en 2023.
3.- Es relevante para este año de elecciones que las instituciones electorales sigan apareciendo entre las instituciones públicas que más confianza despiertan en la ciudadanía. En el año 2017, su nivel estaba en cuestión pues solo el 33.3 por ciento de los entrevistados declararon tener algo o mucha confianza en ellas. En el año 2023, ese porcentaje subió al 54.7 por ciento.
4.- Las críticas que el presidente López Obrador hace con frecuencia al sistema de justicia encuentran campo fértil en una baja valoración de los ciudadanos, con relación a otras instituciones. Los jueces y magistrados tienen la confianza del 39.4 por ciento de los entrevistados. Aunque ese porcentaje subió desde el 31.7 por ciento de 2017, sigue en la parte baja. Los ministerios públicos tampoco generan confianza, pues el porcentaje que obtienen es de 38.6 por ciento.
5.- Otro de los elementos que destaca en la encuesta es que de modo consistente son los partidos políticos, así como las cámaras de Diputados y Senadores, las instituciones públicas que menos confianza concitan entre los ciudadanos. Las cámaras están en un nivel de 34.5 por ciento, mientras que los partidos se encuentran en 28.9 por ciento. Ambas instituciones subieron respecto al nivel de 2017, que era de 20.6 y 17.8 por ciento, respectivamente, sin embargo, siguen estando en la lona.
Otra manera de expresar esos porcentajes es que probablemente el 71.1 por ciento de los entrevistados no les tiene confianza a los partidos políticos, en general.
Hay que recordar cuando Xóchitl Gálvez se convirtió en una figura emergente de la política nacional hacia el segundo trimestre del año pasado.
Algo que atraía de ella es que parecía no tener arraigo en los partidos que formaban el Frente, sino entre los ciudadanos no partidistas.
Estamos en plena competencia electoral y es muy temprano para obtener conclusiones, pues como le he comentado, aún pueden ocurrir muchas cosas, pero la hipótesis que señala que es probable que los partidos políticos no le sumen a la candidata del Frente opositor, sino que le resten, podría sustentarse en función de los datos que revela esta encuesta del INEGI.
Fuente: El Financiero