Este lunes Reyna Miguel Santillán culminó su periodo como presidenta e integrante, por lo que el Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción queda con dos miembros; Congreso local no ha nombrado nuevos
Reyna Miguel Santillán presentó su informe de actividades como presidenta del Comité de Participación Ciudadana (CPC) del Sistema Estatal de Combate a la Corrupción, con el que, además, concluye su periodo como integrante del organismo.
Con la salida de Reyna Miguel, deja inoperante el CPC al quedar únicamente dos mujeres de un total de cinco integrantes.
De acuerdo con la legislación local, para que este organismo funcione es necesario un mínimo de tres de los cinco integrantes con el fin de que sus decisiones se realicen de manera coordinada. A la fecha, la 65 Legislatura del Congreso de Oaxaca no ha conformado la Comisión de Selección para lanzar la convocatoria e iniciar el proceso de designación de los nuevos miembros.
Una de las funciones principales del CPC es la emisión de recomendaciones a las autoridades, con el objeto de que adopten medidas dirigidas al fortalecimiento institucional para la prevención de faltas administrativas y hechos de corrupción, así como al mejoramiento de su desempeño y del control interno.
Otra es la creación de una plataforma digital única que integre y conecte los diversos sistemas que posean datos e información necesaria para verificar no sólo los intereses y patrimonio de los servidores públicos, sino también para monitorear el adecuado manejo y uso de los recursos públicos, así como de sanciones, adquisiciones, licitaciones, bienes, arrendamientos, auditoría y fiscalización. Esta, sigue sin concluirse a más de cuatro años de su creación.
En su informe, la ahora expresidenta del Comité afirmó que en Oaxaca aún queda mucho por hacer, porque la corrupción es la barrera para el desarrollo sostenible y la igualdad en el estado. “Pero estamos decididos en seguir luchando por un Oaxaca, más justo y transparente”, agregó.
También expresó que la transparencia y la integridad deben ser pilares en todas las esferas de la administración pública y la vida diaria.
“Hemos fortalecido lazos con las comunidades indígenas respetando y comprendiendo sus sistemas normativos y asegurando que sus voces sean escuchadas en nuestra lucha contra la corrupción”, dijo.
Fuente: El Universal
