En el marco de la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer a celebrarse en Pachuca, Hidalgo, el secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, dijo que la mayoría de los países miembros de la OEA han ratificado la Convención de Belem Do Para.
“Hoy día la mayor parte de nuestros países miembros, que son 82 de los 84 miembros en ejercicio de la OEA, han ratificado la Convención de Belem do Para y eso es muy importante porque realmente los países han dictado normas, han dictado leyes”.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva, Miguel Insulza detalló que la Convención tiene un mecanismo de seguimiento el cual permite verificar no sólo quienes han ratificado la Convención y dictado leyes ante el tema, sino también la realidad de lo que está ocurriendo.
“Y por desgracia todavía se identifica niveles relativamente importantes de violencia contra la mujer”.
Por otra parte, sobre el posicionamiento de la OEA ante la despenalización de la mariguana, Miguel Insulza manifestó que el organismo no se ha pronunciado sobre ese tema.
Pero las formas actuales de control basadas puramente en la represión no han tenido un efecto positivo, que todavía queda una importante cantidad de consumo de drogas, por lo tanto es necesario buscar mecanismos innovadores de enfrentar el narcotráfico atendiendo sobre todo al usuario y asegurándose de que el crimen organizado no siga controlando todo el asunto de las ganancias.
De acuerdo con el secretario general del organismo internacional, ellos son partidarios de una gran flexibilidad y siguen con mucha atención la experiencia de algunos lugares en los cuales cuando se está llevando a cabo las formas de regulación.
“No es que tengamos una política común, precisamente porque creemos que en este momento no es conveniente que se adopten grandes resoluciones internacionales en este tema.
“Sino más bien que los países que puedan adoptar políticas más flexibles de acuerdo con sus propias realidades internas”.
En cuanto al trasiego de armas en la región, declaró ser un problema complicado porque no solamente América Latina tiene tasas altas de violencia y de homicidios.
Señalando ser cuidadosos al respecto; hay países con tasas bastante bajas de homicidios así que tampoco se puede generalizar el problema; y lo que es más relevante es que el 80 por ciento de esos homicidios son cometidos con arma de fuego.
“El hecho que se junte una gran llegada de armas ilegales e ilegítimas, o que llegan legalmente y después traficadas de manera ilegal con la tendencia, la propensión a la violencia homicida por la vía del uso de armas de fuego es un tema muy preocupante.
“También en este caso nosotros andamos por lo menos como organización de seguir la huella a las armas, saber por donde transitan”.
Por lo que la OEA apoya a las naciones en un sistema de marcaje de armas de fuego que está siendo bastante exitoso, especialmente Centroamérica y el Caribe, pero es un problema imposible de controlar mientras los países que proveen las armas no dejen de hacerlo. “Tan fácil, por ejemplo, en Estados Unidos comprar armas”.
Ante ello, hay que trabajar en conjunto y no que cada país lo haga a su manera.
Finalmente, sobre el asunto de Venezuela, Miguel Insulza dijo que a todos les ha preocupado la situación actual; “yo fui el primero en sugerir que hubiera un diálogo y en ese diálogo participaran como garantes, como testigos algunos cancilleres de la región, eso todavía está en marcha”
Fuente: Radio Fórmula
