Los rumanos acudieron el domingo a las urnas para elegir a representantes de gobiernos locales plagados de corrupción.
Tres encuestas de salida mostraban que Gabriele Firea, ex periodista de la televisión e integrante del Partido Socialdemócrata de centro-izquierda, había ganado con facilidad la alcaldía de Bucarest al llevarse aproximadamente 41% de los votos.
El presidente de esa fuerza política, Liviu Dragnea, a quien le fue dictada en abril una condena suspendida de dos años de cárcel por intentar la manipulación de un referendo de 2012 para un juicio político a un ex presidente de Rumania, entregó a Firea tres rosas rojas después de la difusión de los resultados de las encuestas.
Firea declaró que tendrá “cero tolerancia” hacia la corrupción y expresó su deseo de atraer más inversiones a Bucarest.
Según los mismos sondeos, el segundo lugar correspondió a Nicusor Dan, un matemático que obtuvo aproximadamente 29% de los sufragios y que había incluido en su plataforma el combate a la corrupción.
En Bucarest, el exalcalde y cinco de seis alcaldes de distrito elegidos en 2012 fueron declarados culpables o son investigados por cargos de corrupción. Dos se postularon para la reelección en sus distritos.
Los resultados preliminares serán difundidos más tarde y los definitivos el lunes. La afluencia de votantes en Bucarest fue de poco más del 33%, según las autoridades electorales.
Bucarest, ciudad de más de dos millones de habitantes, tiene este año el presupuesto local más grande de 4.100 millones de lei rumanos (1.010 millones de dólares). Las urnas cerraron a las 9 de la noche (1800 GMT). Para las 8 p.m. habían depositado su voto alrededor del 46,2% de los 18,3 millones de electores, dijeron las autoridades.
Rumania ha emprendido una campaña a gran escala de lucha contra la corrupción en los últimos años, y su agencia anti-irregularidades impulsó con eficacia juicios en 1.250 casos, entre ellos el de un ex primer ministro y cinco ex ministros, su mejor actuación en la historia.
Según la oficina de los fiscales anti-corrupción de Rumania, más de 100 alcaldes, vicealcaldes, presidentes y vicepresidentes de juntas de distrito fueron acusados formalmente de corrupción en 2015.
Sin embargo, quienes están acusados formalmente de corrupción pero no han sido declarados culpables pueden postularse a cargos públicos en comicios.
El alcalde de la ciudad noroccidental de Baia Mare, Catalin Chereches, que está en prisión a la espera de un juicio bajo cargos de haber obtenido ilícitamente dinero de un equipo local de fútbol, al parecer fue reelegido con aproximadamente 70% de los votos, según encuestas de salida.

Fuente: 20 Minutos