El Instituto Nacional Electoral (INE) prepara una reestructura en el 2016 a su esquema organizativo, a fin de mejorar en sus funciones. Aclaró que no implicará un presupuesto mayor.

“Un propósito fundamental es hacer más eficiente la estructura de las áreas y mejorar la ejecución de los procesos administrativos que se llevan a cabo por parte de la Dirección Ejecutiva y Unidades o Coordinaciones Técnicas, así como de los órganos ejecutivos delegaciones, bajo la coordinación de la Junta General Ejecutiva”, precisa el Plan Estratégico del INE 2016-2025.

El consejero Javier Santiago explicó que, por ejemplo, se le va a pedir al Registro Federal de Electores que, sin incrementar plazas, se reorganice para atender la credencialización de mexicanos en el extranjero. Consideró necesario iniciar una reflexión sobre la necesidad de construir una nueva visión del rumbo estratégico del INE que permita cumplir con tareas a corto, mediano y largo plazo, destacó.

El consejero reconoció que no obstante de ya contar un estudio de la empresa Deloitte ordenado en el 2013, por el que el entonces IFE pago 16 millones de pesos, el INE deberá contratar una consultora para evaluar los programas internos y realizar el reajuste a las nuevas facultades que se le dio con la reforma electoral del 2013.

“El estudio fue sobre el IFE, y desde mi punto de vista, Deloitte tiene omisiones relevantes. Hace sugerencias que implicaban reformas a la ley que la institución no puede realizar”, argumentó.

Es por eso que el INE ordenó a su Comisión Temporal de Modernización Institucional iniciar una agenda de trabajo para analizar los reajustes a la estructura administrativa y operativa…

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