Moon Jae-In, un veterano de la lucha por los derechos humanos favorable a un acercamiento con Corea del Norte, ganó ampliamente las elecciones presidenciales en Corea del Sur.

Moon, un hijo de migrantes norcoreanos, gran favorito en los sondeos y candidato del Partido Democrático, de centroizquierda, obtuvo 41.4% de los votos, según una encuesta de tres cadenas de televisión.

El conservador Hong Joon-Pyo quedó muy por detrás, con 23.3 % de los votos, seguido del centrista Ahn Cheol-Soo (21.8%).

Las elecciones se llevaron a cabo en un clima político marcado por el escándalo de corrupción que terminó con la destitución de la presidenta Park Geun-Hye y por las tensiones con Pyongyang…

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